La llegada

Todo empezó en el aeropuerto del Prat, la flamante T1 nos esperaba. Llegamos a las 8.30, me despido de mis padres y cojo mis dos maletas y mi portátil y me adentro en la t1. Voy hasta los mostradores de Vueling, allí escucho como dicen mi nombre. Es Anabel (de mataro), después llegaría Ana de Lleida y finalmente Aleix de Reus. Ya estamos todos los catalanes. Facturamos y embarcamos, el avión despega a las 09:40 y llegamos a Venecia con unos 20 minutos de antelación. Todo a cambiado. La gente habla italiano, los carteles están en italiano. La aventura Erasmus ha empezado: estamos en ITALIA.

Los cuatro catalanes que vamos nos dirigimos a coger nuestras maletas… sale mi maleta, la de Aleix, la de Anna y sorpresa!!! Donde esta la maleta de Anabel? Vamos al mostrador y le dicen que su maleta esta en Barcelona… nos tendremos que esperar hasta las 4 que nos la darán… a las 15.20 tienen que llegar los que vuelan desde Madrid. Son las 12.30. que hacemos hasta entonces? Nos vamos a ver Venecia. Llegamos a la ciudad de los canales. Llueve. Deja de llover. Lo poco que vimos me gusto. Nos comimos nuestra primera pizza italiana del Erasmus. Son casi las 15.30. Nos volvemos al aeropuerto. Durante el trayecto en bus me llaman los que llegaban desde Madrid. Llegamos. Nos saludamos todos. Por fin!! Ya tenemos la maleta de Anabel. Ahora si que puede empezar la aventura.

Es el momento de ir hasta la estación de Mestre para pillar un tren hasta nuestro destino. Ya dentro del tren me doy cuenta que todos los que vamos parece que nos conozcamos de hace tiempo. Muchas risas. Supongo que hay algo que nos une: Erasmus en Trieste 09/10.

Llegamos a las 20 horas a Trieste. Mis compañeros se dirigen al hostal. Yo pillo un taxi hasta mi piso. 10 eurazos me cobro el taxista. Llego y pico al timbre. Tardan en contestar. Esos segundos se me hicieron eternos jejeje. Me abre y no me da tiempo a girarme y veo a mi compañero de piso que viene a ayudarme a subir las maletas. Me pregunta si quiero mangiare. Le digo que algo de hambre tengo pero poca. Me dice que el me hace algo para cenar. OK. Hay en cosas que cuesta comunicarse. Necesitamos en ocasiones el traductor del google para hacernos entender. Mientras yo abro las maletas él me empieza a hacer unos macarrones con tonno (atún). La verdad es que no estaban malos. Después me voy a duchar y pensé que estaba reventado y que no iría hasta donde están los otros compañeros, porque no se llegar y no me conozco aún el transporte público de aquí. Vemos la tele y hablamos o mejor que hablar nos intentamos hacer entender. Yo más o menos le entiendo todo lo que me dice, pero yo no se expresarme lo suficiente para que me entienda. Me dice que mañana cuando salga de la universidad a las 11 vendrá a buscarme e iremos a hacerme el codigo fiscale.

Por cierto la casa de lujo… pero eso lo dejamos para otro día…